lunes, 29 de agosto de 2011

Pasividad frente al mundo


La vida es muy peligrosa.
No por las personas que hacen el mal,
sino por las que se sientan a ver lo que pasa.

Albert Einstein.



Me prometí no politizar este blog, mantenerme lejos de la actualidad, pero me resulta imposible. Por supuesto que no voy a hablar de política, entre otras cosas, no creo en los políticos, son seres humanos, por lo tanto son imperfectos. Tiendo a pensar que la naturaleza humana está abocada al mal, es necesario una educación, creencias, valores y esfuerzo diario para tender al bien.

Enciendes la televisión, abres un periódico, sintonizas la radio y ¿qué te encuentras?.

Las noticias nos informan de una situación y clase política en España que, no sólo nos lleva “cuesta abajo y sin frenos” a lo más profundo de una crisis de la que parece no vamos a salir en 20 años, sino también da ganas de vomitar. Para manejar un país a tu antojo y hundirlo no necesitas ni tener estudios, con tener las espaldas muy anchas, ningún tipo de escrúpulo, ni valor, y ganas de llenarte los bolsillos y asegurarte una jubilación de multimillonario es suficiente.

También nos encontramos con disturbios brutales en Londres, que por supuesto hacen que el Reino Unido se empiece a plantear el gigantesco problema social que padecen, un problema que abarca desde carencias alarmantes en educación, hasta la increíble vida parasitaria hacia las ayudas sociales que padecen un número cada vez mayor de la población. Tal vez lo que ha ocurrido sirva para que realmente haya cambios en el sistema social y educacional, pero claro eso dependerá del interés que tenga el político de turno, parece imposible que se pueda cambiar algo que se ha estado alimentando y sustentando durante tanto tiempo porque interesaba o porque no era de interés.

Hablamos de problemas que nos tocan de cerca, pero claro, si le echas una mirada al mundo tal vez prefieras quedarte ciego.

Al final parece que todo se reduce a un círculo de poder económico y político con tal fuerza que mueve al mundo a su conveniencia, y nosotros sus marionetas.

Podréis pensar que en ese caso una marioneta no tiene nada que hacer en la lucha contra esas fuerzas tan poderosas, pero como siempre digo, si nos esforzamos cada día en cambiar algo de nuestro pequeño mundo, en algún momento los cambios repercutirían a nivel global. Dicen que si la humanidad entera diera un salto al mismo tiempo la rotación de la tierra cambiaría, no sé si es cierto (no tengo ni idea de ciencia), y por favor no lo intentemos, pero igualmente con grandes cambios a nivel individual se consiguen cambios globales en la sociedad, puede y debe funcionar.

No quiero decir que nos los haya, hay movimientos, tal vez tardíos, tal vez manipulados, tal vez adecuados... eso lo dejo al gusto de cada uno, pero no es suficiente, se necesita de un gran cambio a nivel personal, de pensamiento, de apertura al mundo, de educación, de valores y lucha por los derechos humanos.